El sistema que debería protegerlas las está dejando solas.  

Escribe Lucía Pérez Chabaneau
Directora Ejecutiva Amnistía Internacional Uruguay

Todos los días, hay niñas uruguayas que son víctimas de violencia sexual. Muchas veces, los mecanismos estatales fallan: no detectan a tiempo, no actúan con rapidez, no brindan acompañamiento integral ni garantizan acceso a la justicia.   

Hace algunas semanas, se dio a conocer el caso de una niña de 12 años con un embarazo detectado a los 5 meses de gestación en Artigas. Estos casos de violencia y abuso han vuelto a mostrar las fallas graves de los mecanismos de protección.  

El trabajo de Amnistía Internacional en la campaña “Niñas, no madres” ha evidenciado que el sistema de protección de las infancias y adolescencias, enfrenta barreras persistentes para prevenir, atender, reparar y proteger.  

Niñas embarazadas, niñas sin atención adecuada, niñas expuestas a la desprotección institucional. No son casos aislados, y deben ser una alerta roja para un país que debe cumplir con su compromiso con los derechos humanos de todas las niñas.  

Desde Amnistía Internacional Uruguay exigimos una respuesta urgente y coordinada del Estado: que se investiguen las responsabilidades institucionales; que se asegure la protección efectiva y oportuna de cada niña; y que se garantice el acceso a la salud, la justicia y la educación sin violencia ni discriminación.   

Para que las niñas puedan ser niñas. 

DONAR