22 de marzo, Día mundial del agua.
El acceso al agua potable es un derecho humano consagrado en la Constitución de la República. Sin embargo, Uruguay enfrenta un problema histórico con la calidad del agua, afectada principalmente por la contaminación difusa debido a los agroquímicos y las prácticas productivas industriales. Esta situación pone en riesgo tanto los ecosistemas como la salud de la población.
En 2023, la crisis hídrica y la sequía prolongada dejaron en evidencia la escasez de agua en regiones clave, como la Cuenca del Río Santa Lucía, que abastece al 60% de la población. Las respuestas para solucionar el abastecimiento aún no han llegado de la mano de proyectos adecuados desde el punto de vista técnico y de la cobertura, con la transparencia debida y discutido en procesos participativos para garantizar el bienestar de la población y la sostenibilidad del recurso.
A 20 años del plebiscito del agua, la defensa del derecho al agua debe acompañarse de una gestión pública transparente y participativa del recurso. El acceso y la calidad del agua deben ser prioridad.